El martes, el Ministro de Economía y Finanzas, Marcelo Montenegro, informó que Bolivia es uno de los países que más crece de la región pese a un contexto adverso. Su proyección no es compartida por expertos del área.
El balance positivo de la economía boliviana calificado por el Ministro de Economía, Marcelo Montenegro, no es compartido por especialistas. Dos expertos consultados por EL DEBER cuestionaron el balance positivo hecho por la autoridad, pues aseguran que no condice con la realidad nacional por la escasez de dólares y la reducción de los ingresos de las personas.
El especialista en finanzas Jaime Dunn, por ejemplo, señaló que el diagnostico hecho por la autoridad estatal no refleja la realidad que vive el país. “El análisis del ministro no es muy honesto, porque las razones por las que crece el país son por las equivocadas, no por las correctas. La razón por la que la inflación baja en Bolivia es porque está reprimida, eso es malo porque nos da la impresión que todo está de maravilla, pero no es así”, dijo Dunn.
Según el analista, la economía crece a costa del déficit fiscal y el endeudamiento interno, factores que son peligrosos. “El déficit fiscal es malo, pero el gobierno no dice nada. Otra cosa, el gobierno ha cambiado la definición de deuda interna, dice que la deuda interna no considera la deuda con las empresas públicas, que son más de $us 6.000 millones”, acotó.
En esa línea sostuvo que el Gobierno limita la actividad al restringir mediante la entrega de cupos la exportación de determinados productos, mientras se aumenta el gasto público.
“Obviamente, una economía, gastando toda su plata, puede crecer, pero la cosa no es solo gastar, sino invertir y promover la diversificación económica, las exportaciones. Cuando el ministro dice que Bolivia va a estar en el tercer lugar en América Latina (en crecimiento económico), (hay que considerar que) los primeros dos países crecen de una manera diferente, de una manera sana, con participación de la inversión privada, el ahorro nacional, el incentivo a las exportaciones”, manifestó.
Por último, dijo que el Gobierno maneja indicadores de forma discrecional que no coinciden con la realidad que se vive en el día a día. “Hay que preguntarle a la gente si todo está bien, ¿por qué no hay dólares en el país? Basta que hagan esa pregunta”, señaló.
En esa línea, el exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB) José Gabriel Espinoza, en declaraciones al programa radial Dinero 360, profundizó los cuestionamientos al ministro Montenegro.
Espinoza aseguró que la actual coyuntura dibuja un escenario de pesimismo que es preocupante. Explicó que antes Bolivia vivió diversas crisis, “pero había esperanza; sin embargo, ahora no sucede lo mismo y ello debe preocupar a las personas, pues si la gente deja de invertir, deja de consumir”.
Para Espinoza, el Gobierno ha perdido credibilidad de la población que vive del día, como los comerciantes y los choferes.
“Lo que viven las familias es diferente al escenario que muestra el Gobierno. Por ejemplo, los ingresos de las familias están relacionados con el tipo de empleo que tienen, hoy en día hay preocupación por el empleo. Es el caso de los que trabajan en Uber o taxi, que dan vueltas todo el día y no llegan a juntar ni para la renta”, señaló.
Versión estatal
Ayer el ministro de Economía y Finanzas, Marcelo Montenegro, aseguró que la demanda interna sigue siendo el motor de la actividad económica del país. “La demanda interna sigue siendo un motor importante, ahí está el consumo, la inversión que son componentes clave de nuestra demanda interna y del modelo económico. Es la demanda interna la que permite sostener la economía nacional”, resaltó.
Luego Montenegro dijo que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) incrementó su proyección de crecimiento para Bolivia este 2023 de 2% en abril a 2,2% en septiembre.
La autoridad indicó que el Instituto Nacional de Estadística (INE) reportó a inicios de este mes que, producto de una variación negativa (baja de precios) de 0,06%, la inflación acumulada a septiembre llegó la 1,49%.
Al respecto, Espinoza señaló que, “cuando el Gobierno mira precios, las familias ven gastos, por ejemplo, la cuota del colegio de los hijos que cada año sube un 5%. En ese momento, hay una inflación del 5% que se mantiene todo el año y el Gobierno dice no hay inflación, pero sucede que el gasto de la familia subió y no vuelve a bajar”.
Fuente/eldeber.com.bo
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