El Comando Policial de Santa Cruz activó el «Plan Z» para capturar a los sicarios que acribillaron a dos personas y dejaron a otras dos heridas en el municipio fronterizo de San Matías (Santa Cruz), vecino de la ciudad brasileña de San Luís de Cáceres. A esa población, distante a 110 kilómetros de San Matías, huyen los sicarios que “ejecutan” algún encargo en Bolivia.
Las última matanzas en esta zona del país de gran vegetación, actividad ganadera e impresionantes atractivos turísticos ocurrieron a mediados de septiembre último con cuatro muertos en tres incidentes separados y que obligó a la fuerza pública a movilizar a 170 de sus efectivos.
“La Policía ha activado el Plan Z, está desplegado el 100 por ciento de la Policía”, informó el jefe policial de San Matías, Orlando Montaño.
Ortuño explicó que aún se desconocen lo móviles del crimen, pero dijo que las investigaciones se intensificarán para esclarecer este nuevo hecho de sangre.
“La Policía ha estado haciendo su labor preventiva, como corresponde dando cumplimiento a sus controles, hemos estado recuperando espacios públicos en las plazuelas, en la carretera y en la frontera”, remarcó.
El hecho violento se registró al finalizar el lunes, cuando dos delincuentes llegaron a bordo de una motocicleta y dispararon a dos hombres que se dirigían a una carnicería ubicada a dos cuadras de la plaza principal del municipio fronterizo con Brasil.
Las víctimas fatales de este hecho fueron identificadas como Roly Santana Paina de nacionalidad brasileña y José Blanco de nacionalidad boliviana. Además, los sicarios dejaron heridos a Eliezer Figueredo y Enrique Aranda dándose a la fuga.
Los efectivos policiales investigan este hecho, los operativos de control y búsqueda se intensificaron esta madrugada con controles en haciendas cercanas a San Matías donde se presume que se esconden los sicarios.
Septiembre
En septiembre cuatro personas fueron asesinadas violentamente. Conocido los hechos de sangre, la Policía desplazó a más de 170 efectivos de diferentes grupos especiales a la zona y se coordinó con investigadores y fiscales operativos de rastrillaje y allanamientos en el municipio y comunidades aledañas.
San Matías es una región violenta. Es un territorio en el que opera el crimen organizado de Bolivia y Brasil, sobre todo los vinculados con el narcotráfico y el robo de vehículos.
Desde la década de los noventa se impone el delito en ese territorio. Ingresan vehículos robados de Brasil que se intercambian por droga, se ejecutan secuestros de personas y los asesinatos en vía pública son, además de violentos, frecuentes.
El municipio amazónico tiene un privilegiado acceso de entrada al Pantanal boliviano y administra 2,9 millones de hectáreas de un área protegida rica en biodiversidad.
Su potencial turístico, sin embargo, se pierde ante la crónica violencia que azota a este territorio ubicado en el extremo del mapa de Santa Cruz y vecina de la ciudad brasileña de San Luís de Cáceres.
A esa población, distante a 110 kilómetros de San Matías, huyen los sicarios que “ejecutan” algún encargo en Bolivia.
Esa situación, a la que se agrega un código del silencio en la población, que teme acciones de venganza por cualquier “infidencia”, impide que los casos se resuelvan.
En muy pocos se ha logrado justicia por la vía ordinaria.
Fuente/abi.bo
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