martes, 8 octubre de 2024

El Tercer Ojo

Noticias de Tarija y Bolivia (Seguridad/Policial/Judicial)

“Sacerdotes peleaban entre ellos para abusar a los niños”, el crudo relato de una víctima

Una víctima relató todos los vejámenes que sufrió por sacerdotes jesuitas en Cochabamba.

Se han conocido declaraciones que causan indignación, impotencia y mucho dolor. En medio del escándalo que destapó los abusos a niños por parte del sacerdote jesuita Alfonso Pedrajas, más conocido como el padre ‘pica’.

Ahora indican que al interior de la orden había sacerdotes que se disputaban, a los niños que abusarían en Cochabamba. La declaración fue realizada por una víctima de los padres jesuitas Alfonso Pedrajas, Carlos Villamil, Luis Roma Padrosa, Eduardo Cabanac y Jorge Vila.

“Yo sé bien que no soy la única víctima”, le dijo al exjesuita Pedro Lima. El calvario que vivió inició en 1975, al quedar huérfano de padre y madre. Como una luz de esperanza llegó al colegio-internado Juan XXIII, en Cochabamba.

Tenía tan sólo ocho años, ingresó a esta institución por recomendación de unas monjas que trabajaban cerca de una escuela de Fe y Alegría. “Los responsables del colegio pensaron que yo tenía 14 años; aún no sé cómo, pero me dejaron ingresar”, relata. Actualmente ha tratado de superar todos los vejámenes que sufrió, radica en el exterior, pero en su vida las secuelas le han generado problemas en sus relaciones de pareja. Una herida que jamás sanará, y lo marcó para siempre.

Los años que estuvo en el colegio – internado Juan XXIII, fue abusado sexualmente, nunca tuvo paz, las vejaciones también se repitieron en el hogar de niños en Tacata. Su primer agresor fue el padre ‘Pica’. “Hacía que le masturbara y le haga sexo oral. Me hacía dormir en una cama muy cerca de él. Fue muy traumante ese primer mes”.

En su diario Pedrajas escribió: “Hice daño a mucha gente (¿85?), demasiada”, admite en sus memorias. Los terribles hechos están plasmados, como un mudo testigo de las aberraciones que cometió contra varios inocentes.

Este hombre vivió un infierno, cuando creía que todo terminaría al ser trasladado al hogar de niños de Tacata, cerca del municipio de Quillacollo. Conoció Eduardo Cabanac y Carlos Villamil, eran sacerdotes que abusaban niños. Posteriormente llegó Luis Roma Padrosa, quien fue denunciado de abusar niños y niñas en su misión pastoral en Charagua, Santa Cruz.

Con la llegada de este pederasta, “hubo una discordia por los niños, pues Lucho sacaba fotos a los niños que abusaba, después de abusarlos les daba algunos pequeños privilegios (…) entre jesuitas se disputaban a los niños y por esos celos y discordias había luchas frecuentes entre ellos”, fue el crudo relato.

La víctima vive hoy en extranjero, adonde se fue con $us 1.000 que le dio ‘Pica”. Lo último que le dijo fue: “Lo lograrás, eres un hombre muy fuerte y sé que lo lograrás; cuida ese dinero, hazlo crecer y sal del país”.

Fuente/reduno.com.bo

error: