La consulta médica para un recién nacido reveló a un clan familiar dedicado a traficar recién nacidos en Cusco.
La revelación de una red de tráfico de recién nacidos, que operaba en Cusco, y con indicios de haber ‘vendido’ alrededor de 20 menores, consterna a Perú.
El 4 de septiembre, Fanny Hurtado, de 45 años de edad, llegó a un centro médico con un recién nacido en brazos. Junto a ella estaba Rosa Doris Huayhua, quien cargaba un maletín del bebé. Ambas llegaron en un vehículo conducido por Rubén Mora, según medios peruanos.
Las mujeres buscaban atención médica para el bebé de dos semanas de edad; sin embargo, el personal médico comenzó a sospechar cuando el pequeño comenzó a llorar y Hurtado se negó a amamantar y ante la insistencia, accedió, pero no salía la leche de su pecho.
Además, la mujer alegaba haber dado a luz en su domicilio, lo que hubiera implicado un riesgo en su salud, pero se negaba a ser revisada, tampoco contaba con la cartilla de los controles prenatales.
“Le dije de manera directa a la señora, usted no es la madre, ella me dijo que le estaba haciendo un favor a una familia que iba a cuidar al bebe”, contó la médico, quien llamó a la Policía para denunciar el hecho, citada por Perú 21.
La Policía llegó y las dos mujeres fueron detenidas y comenzaron las investigaciones.
“Me dejé llevar porque quise ser madre como toda mujer. Estaba en depresión porque acababa de fallecer mi padre. Yo no quería hacerle daño al bebé. Yo lo salvé. He pecado por amar a un niño”, contó Hurtado tras ser detenida, según cita el diario El País.
Según el relato de la acusada, una mujer se acercó a ella para que cuide el bebé de una sobrina. Y durante sus interrogatorios negó haber pagado por el recién nacido. Sin embargo, los chats entre las mujeres indican que hubo una transacción por 3.000 soles (811 dólares) por el niño. Hurtado indicó que le dijeron que eran los gastos de la adopción.
En tanto, la Fiscalía de Trata de Personas en Perú indicó que el caso es más complejo, pues los chats tienen indicios de que la organización criminal ‘vendió’ alrededor de 20 bebés. Las autoridades desconocen el paradero de los niños y tampoco se conoce el origen del bebé que fue llevado al centro médico.
Fanny Hurtado fue enviada a un penal en Cusco con detención preventiva: sin embargo Rosa Doris Huayhua y Rubén Mora fueron liberados y huyeron antes de su audiencia, donde también les dieron detención preventiva. Ante esto, la jueza fue cuestionada por su determinación.
La captación de víctimas
Según las primeras investigaciones citadas por Perú 21, las hijas de Rosa Doris Huayhua también estaban implicadas y ayudaban a captar a adolescentes gestantes, que dudaban de tener a sus hijos.
Según los indicios, las captaciones se hacían en un centro obstétrico, que era dirigido por una de las hijas de Huayhua y que funcionaba de manera irregular, además realizaban abortos clandestinos.
A las menores las convencían de dar a luz para luego ‘venderlos’ al mejor postor. Y luego, otra de las hijas de la acusada se encargaba de falsificar los certificados de nacidos vivos y otros documentos, indica el reporte del diario peruano.
“A ese lugar podrían haber acudido menores adolescentes, que abortaban o que por estar en condiciones de vida bastante deplorables, optaban por hacerlo. De esta manera, entregaban a sus bebés a cambio de una cantidad de dinero”, indicó la fiscal la fiscal superior y coordinadora nacional de las Fiscalías Especializadas en Delitos de Trata de Personas, Rocío Gala, citada en Perú 21.
Las autoridades en Perú continúan con las investigaciones y el caso se encuentra en etapa preparatoria. Además se busca determinar si hay más implicados, la cantidad de víctimas y sus destinos.
Fuente/unitel.bo
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