Desde el Colegio de Ópticos denunciaron irregularidades como la falta de un laboratorio y un ejercicio ilegal de la profesión por parte del personal, sin embargo, seguía operando sin autorización.
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) inició la tarde de este lunes una investigación por presuntos delitos de estafa y atentado a la salud en contra de los propietarios de una óptica ubicada en la calle Cochabamba que funcionaba sin autorización y que presuntamente entregaba lentes a sus clientes sin que la medición coincida con la prescripción médica.
Los oficiales de la fuerza anticrimen que realizaron una verificación a este negocio en horas de la tarde informaron que la causa se abrió a partir de la denuncia de una mujer a la que le entregaron un par de lentes que no respondían a lo instruido por su oftalmólogo.
Este operativo estuvo acompañado por los representantes del Colegio de Ópticos, quienes aseguraron que el hombre que estaba atendiendo el negocio estaría incurriendo en un ejercicio ilegal de la profesión.
Entre las irregularidades que encontraron, además de la falta de documentación del establecimiento, es la carencia de un laboratorio, que es uno de los requisitos que establece el Colegio de Ópticos y el Servicio Departamental de Salud (Sedes) para entregar un permiso de funcionamiento.
Indicaron que los lentes se hacen en base a una medición médica y los ópticos tienen que regirse a realizar ese trabajo como indica el oftalmólogo. Las consecuencias pueden incluir cataratas, incluso a corto plazo u otros, debido a que cada medición es personalizada en base a diez parámetros que son irrepetibles entre un paciente y otro. Es por eso que existiría un atentado contra la salud.
La dirigencia del ente colegiado expresó que cuando una óptica desea obtener el permiso, en primer lugar, es inspeccionado por el ente colegiado y luego se remite el trámite al Sedes. El último reporte da cuenta de 22 ópticas legalmente establecidas, no figura este negocio.
Inspección
Cuando los efectivos llegaron al lugar, ingresó un segundo investigado que aseguró, en un inicio, ser el hermano del regente de la óptica y que él mismo trabaja en otro negocio del mismo rubro. Sin embargo, luego cambió su versión diciendo que ya no cumple funciones en otra óptica.
Esta situación llamó más la atención de los representantes del Colegio de Ópticos, quienes aseguraron que esta persona figura como el regente de un negocio que sí está autorizado, esto en el último registro del Sedes. Agregaron que un profesional no puede cumplir funciones en dos ópticas a la vez y que esta situación amerita la expulsión de la entidad.
La fuerza anticrimen en coordinación con el personal especializado realizará un peritaje a esta óptica en particular, pero también llaman a la población a denunciar si es que la situación se repite en otros lugares o en supuestas campañas solidarias en las que podría atender personal sin un título profesional que solo busca estafar a las personas.
El dato
Ilegal
El último reporte del Sedes da cuenta de 22 ópticas legalmente establecidas, no figura este negocio.
Fuente/elpais.bo
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