La alarmante cifra corresponde únicamente a la capital cochabambina. El 90% los agresores son miembros del entorno familiar.
La Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA) atendió 25 casos de embarazo en niñas y adolescentes, de los cuales 5 embarazos fueron interrumpidos de manera legal y uno tiene sentencia condenatoria.
En el caso donde se logró la sentencia condenatoria, el agresor se sometió a un proceso abreviado y fue acusado por el delito de violación infante niña, niño y adolescente, informó el jefe de la DNA, Edwin Pérez.
Puntualizó que el resto de los casos se encuentran con imputación formal en la etapa preparatoria, “Se está investigando cada uno de los casos y en coordinación con los abogados asignados al caso, se busca llegar a la sentencia correspondiente”, sostuvo Pérez.
Lamentó que casi en un 90% los agresores son miembros del entorno familiar y las víctimas tienen las edades desde 11 hasta los 14 años. Es un delito muy grave que cometen estas personas, muchas veces por el descuido de sus progenitores, cuestionó Pérez.
Fuente/reduno.com.bo
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