El exfiscal anticorrupción Ánghelo Saravia afirmó que dentro del caso Fondo Indígena, el entonces fiscal general Ramiro Guerrero y el exfiscal departamental de La Paz Edwin Blanco lo presionaron para que revierta la primera orden de aprehensión emitida contra la exministra Nemecia Achacollo.
“Era un caso complejo y siempre estaba monitoreado por el fiscal general y el fiscal departamental, me decían a quién aprehender, ‘a este sí, a este no’, decían, entonces yo tenía que hacer peripecias para que la señora Achacollo sea citada a declarar por el desfalco”, afirmó.
En contacto con Página Siete, Saravia reiteró las denuncias que realizó contra Guerrero y Blanco por las irregularidades y manipulaciones en la investigación.
“Presenté estos informes a mis superiores en la Fiscalía General”, manifestó.
Saravia recordó que el 21 de julio de 2016, por medio de una llamada al celular de Blanco, Guerrero ordenó que se revierta la orden de aprehensión que ya había sido ejecutada por los policías.
“(Guerrero) me dijo que no podíamos aprehenderla, que estaba en riesgo su cabeza y mi cabeza, en un primer momento yo no hice caso. Me amenazó la familia de la señora Achacollo”, relató Saravia.
El exfiscal se pronunció luego de conocer la muerte del exdirector del Fondo Indígena Marco Antonio Aramayo, quien denunció el desfalco millonario a esa institución. Saravia manifestó que esas presiones le impidieron avanzar en la investigación contra los miembros del directorio, que estaba conformado por Achacollo y varios dirigentes del MAS, que en algunos casos son actuales legisladores y diplomáticos.
Fuente/paginasiete.bo
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