miércoles, 27 noviembre de 2024

El Tercer Ojo

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Evistas acorralan a Arce por 5 flancos; ven que buscan incidir en el Gobierno

LAS ARREMETIDAS SUBIERON DE TONO Y HASTA SE HABLA DE “ALTA TRAICIÓN”. La denominada “ala renovadora” considera que el expresidente Morales “quiere recuperar el poder como víctima”. Los evistas replican que realizan observaciones en busca de mejorar la gestión del Ejecutivo.

El evismo acorrala al presidente Luis Arce desde al menos cinco flancos, los cuales están relacionados con cuestionamientos a su gabinete y hasta sindicaciones de “alta traición”. Todo ello se da en un contexto en el que las pugnas dentro del Movimiento Al Socialismo (MAS) subieron de tono.

Analistas ven que el evismo busca un mayor control en el Ejecutivo, por lo que despliega una estrategia de desgaste. La denominada “ala renovadora” considera que el expresidente Evo Morales “quiere recuperar el poder como víctima”. Los evistas sostienen que realizan observaciones en busca de mejorar la imagen y gestión del Ejecutivo.

Los frentes de la arremetida se dan a nivel de Gabinete, de la Unibol de Chimoré, del MAS Santa Cruz, del propio binomio y de las escuelas de formación política.

El tema cobra vigencia debido a que hoy se prevé que Arce se reunirá, en la Casa Grande del Pueblo, con la Coordinadora de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba, que es presidida por Morales. Además, para el 22 de junio, se alista un encuentro de la plana mayor del MAS, cita en la que prevén anular las tendencias y frenar a Choquehuanca.

Los frentes, uno a uno

1) Desde de diciembre de 2021, la facción del MAS que respalda a Morales presiona, sin éxito, para que haya cambios en el Gabinete. El descontento persiste hasta la actualidad y los evistas observan a cinco ministros: Eduardo del Castillo (Gobierno), Franklin Molina (Hidrocarburos), Édgar Montaño (Obras Públicas), Jeyson Auza (Salud) e Iván Lima (Justicia).

El diputado Héctor Arce, del MAS, comentó que en las próximas reuniones con los mandatarios se hablará nuevamente sobre la necesidad de un ajuste en el Gabinete. “Las sugerencias de las organizaciones sociales no han sido tomadas en cuenta, las reuniones que vienen son con ese carácter de hacer los ajustes al Gabinete de ministros para mejorar la gestión”, enfatizó.

2) El pasado martes, el senador masista Leonardo Loza acusó al vicepresidente David Choquehuanca de estar detrás de los conflictos en la Universidad Indígena Quechua Casimiro Huanca (Unibol) de Chimoré, que es una zona considerada bastión de Morales. En esa casa de estudios, los estudiantes piden docentes idóneos y una nueva malla curricular. Dos días después de la arremetida, el exmandatario visitó ese centro junto al ministro de Educación, Edgar Pary.

3) La directora de la Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra, Angélica Ponce, denunció que la cúpula evista trata de generar paralelismo en el MAS Santa Cruz, cuya directiva es crítica a Morales y su entorno. “Evo quiere poner a Adriana Salvatierra como cabeza en Santa Cruz, pero las bases no. Quiere poner a su rosca”, sostuvo.

Gerardo García, vicepresidente del MAS, mencionó que se hará un congreso para elegir una nueva directiva, y las bases serán las que definan. Negó que se quiera poner al mando a Salvatierra, pero subrayó que si es propuesta por una organización y sale elegida, será respetada en el marco de la democracia interna del partido.

4) En la última semana, el evismo subió el tono en contra de no sólo Choquehuanca, sino también contra Arce. El martes, García, acusó al primero de buscar fraccionar al partido y de crear su propia estructura política. Luego, criticó al jefe de Estado porque el nuevo ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, juró con la señal de la cruz y no con la señal del MAS. Habló de “alta traición”.

5) En mayo, la dirección nacional del MAS, que es presidida por Morales, instruyó que hasta ministros deban pasar cursos ideológicos en la Escuela Plurinacional de Fortalecimiento Político y rechazó “los talleres y seminarios de formación que llevan algunas instituciones gubernamentales”. La Vicepresidencia, según datos oficiales, impulsa 10 escuelas de líderes, una en cada capital de departamento y El Alto.

A mediados de mayo se desató un enfrentamiento en Tinquipaya (Potosí), con dos fallecidos, luego de que Choquehuanca inaugurara una escuela de líderes.

El politólogo Carlos Cordero indicó que desde el evismo se abren varios frentes para “acorralar” al jefe de Estado. Añadió que esa tendencia muestra que puede hacer daño al Ejecutivo, ya sea por medio de fiscalización, mediáticamente, con marchas o bloqueos, en busca de que ceda a sus solicitudes y de esta manera pueda tener un mayor control en el Ejecutivo.

“Morales quiere demostrar a Arce que, si no es aliado de su gobierno, puede ser un crítico que puede generar una crisis en el Gobierno. En el balance es mejor tener a Morales de su lado de la gestión que tenerlo enfrentándolo. Hay la estrategia constante de debilitamiento de la imagen y gestión de Arce, porque Morales lo ve como potencial candidato”, dijo.

El analista político Manfredo Bravo indicó que el líder del MAS tomó la determinación de desgastar a Arce. Explicó que las presiones que hay contra la gestión gubernamental son planificadas y sistemáticas, y que apuntan también a que el evismo tenga más espacios en el Ejecutivo.

“Hay una estrategia de desgastar la gestión de Arce, Morales ha tomado la decisión de desgastarlo. Morales va a postular a la Presidencia y Arce tiene aceptación, y las presiones pasan por ahí. Son una estrategia de desgaste continuo. Pero en medio de estas pugnas lo malo es que ahora no hay oposición para capitalizar este desgaste”, subrayó.

El legislador Héctor Arce negó que haya un afán de dañar la gestión del jefe de Estado. Agregó que las observaciones que realizan son para mejorar la imagen y gestión del Ejecutivo, porque el MAS es un partido grande y no puede permitirse “chambonadas”.

Ponce aseveró que desde la cúpula evista se habla de un referendo revocatorio para Arce, y que pretenden usar la sentencia contra la expresidenta Jeanine Añez para que Morales pueda reclamar la Presidencia del Estado. Por ello, pidió a esa facción que deje trabajar al mandatario y no perjudique su gestión.

“Morales quiere recuperar el poder como víctima, pero está equivocado, la gente ya no se deja engañar (…). Ya hemos visto, sus guerreros digitales que están hablando de revocatorio, ya están opinando que, si Añez fue sentenciada por el golpe de Estado, no hubo fraude, y Evo tiene que volver al poder. Están ya viendo la revocatoria, pero el pueblo es sabio y no se va a dejar llevar por intereses personales”, aseguró.

García negó que se baraje la posibilidad de un referendo para Arce. Afirmó que como organización política, garantizarán que el mandatario termine su gestión y pueda realizar su trabajo, para que el país pueda recuperar su estabilidad económica.

“Morales quiere recuperar el poder como víctima, pero está equivocado, la gente ya no se deja engañar”.

Angélica Ponce

“Morales quiere demostrar a Arce que si no es aliado de su gobierno, puede generar una crisis en el Gobierno”.

Carlos Cordero

“Las reuniones que vienen (MAS y Gobierno) son con ese carácter de hacer los ajustes al Gabinete de ministros”.

Héctor Arce

Expertos: MAS incluso usa pugna para generar distracción

Los analistas Carlos Cordero y Manfredo Bravo coincidieron en que las pugnas en el MAS responden también a una estrategia de copar la agenda mediática en el país. Ello, principalmente, con dos objetivos: mantener vigente a Evo Morales y buscar que las falencias de la gestión de Luis Arce pasen inadvertidas.

Cordero indicó que con estas peleas Morales está “siempre vigente y los medios se concentran en lo que dice, por lo cual su estrategia es exitosa”. Recordó que en varias oportunidades el líder masista señaló que los medios, “hablarán bien o mal de él, le hacían la mejor propaganda”.

Bravo manifestó que estas pugnas en el partido oficialista podrían ser consensuadas para que la agenda mediática sólo se concentre en ellos. Aseveró que ya hubo estas fricciones anteriormente en el masismo; sin embargo, cuando llegan las elecciones “se unen y articulan para no dispersar los votos y asegurar la victoria”.

Las fricciones en el partido de Gobierno se intensificaron desde el pedido de cambio de ministros, desde fines de diciembre del 2021.

Estas fracturas también quedaron evidenciadas en la representación parlamentaria del oficialismo en la elección fallida del Defensor del Pueblo, en la cual “los azules” votaron divididos.

De cara al ampliado nacional del MAS, del 22 de junio, el evismo apunta a anular las tendencias que hay dentro de ese partido y busca, además, frenar al vicepresidente David Choquehuanca.

Fuente/paginasiete.bo

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